Carta a mi ex

Hoy hace dos años que nos vimos por última vez.

Me pregunto constantemente como es que tu recuerdo no he podido olvidar.

El tiempo ha pasado, nuestros cuerpos han comenzado a demostrar

las resacas de nuestro último encuentro.

El aire ha ido perdiendo poco a poco tu olor

y la distancia ya no tiene su misma importancia.

Dice aquella linda canción “Que un viejo amor ni se olvida ni se llora”,

Y es verdad, ¿por qué he de llorar por algo que ya no esta?

Pero también es verdad que no se olvida.

No se olvida los recuerdos, no se olvidan las risas,

no se olvidan los momentos.

Extraño la ilusión que hacías sentir en mi vida,

pero alguna vez leí que el amor no es un estado

en el cuál permaneceremos, el amor….

El amor es un estado con el cuál vivimos,

El amor es una filosofía de vida.

Aprendí que en la soledad me encontré conmigo misma, gracias.

Aprendí que la libertad no es nada cuándo me encuentro sola, gracias.

Aprendí que el amor es  como el  café negro pues me mantiene despierta,

a pesar de su sabor amargo, gracias.

Debí haber sido en otra vida pingüino.

O tal vez hipocampo, pero la realidad,  es que solo soy yo

siendo fiel a un recuerdo, solo soy yo recordando

un parte de mi vida que no quiero olvidar.

Solo soy yo una enamorada del amor a la que enseñaste amar.

01-oct-2013